martes, 15 de noviembre de 2011

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"PIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIP";
"Habla ¿vas?" ; "Asensishame pee" ; "pisaaaah"; "Avaaanza carajooo"; "Ya pe jefe", entre muchos más vulgares son ruidos que invaden a Lima a diario: una terrible característica de nuestra ciudad.Con el crecimiento acelerado e increíblemente desordenado de la población limeña y la estructura de su espacio el caos vehicular se ha acentuado. Además, con el desaforado aumento de automóviles, tanto particulares como de servicio público, en avenidas y calles que están al borde del cataclismo pues las dimensiones de estos espacios no dan abasto, primero, a la cantidad de autos y, segundo, a la forma atropellante y desordenada en la que circulan.  


El limeño vive condicionado a un entorno agresivo, sucio, descuidado, peligroso, etc. por el pasar del tiempo y la monotonía de la vida: estamos acostumbrados. En los últimos veinte años la cantidad de autos en Lima ha incrementado vertiginosamente.  Esto es simple de observarlo pues bastaría salir entre las 7:00 - 9:00 y 18:00 - 20:00 para entender lo atrapante que pueden ser nuestras calles. Día a día el trasladarse de un punto a otro resulta casi una misión imposible dónde un mar de autos, claxons, gritos, insultos, coimas, pseudo-autoridades, combis, taxis <<algunas veces mototaxis>>, peatones imprudentes, semáforos <<disque>> inteligentes, carteles mal puestos y carteristas se cruzan en la vida de todos nosotros, limeños, que intentamos llegar al otro lado de nuestro destino. Existen muchos factores que explican las razones de este comportamiento dentro de nuestra sociedad: la falta de educación, de oportunidades, masas marginadas a nivel generacional, lenguaje jerarquizador, discrminación,
 sexismo por nombrar algunas, de las cuales profundizaremos dentro de este blog. 





Consideramos que este tema es relevante pues el tránsito es el medio en el que vivimos todos los integrantes de este equipo junto con los ocho millones de Limeños de nuestra capital.Por un lado representa un problema que con el pasar del tiempo y la sobrepoblación se va a agudizar. Por otro resulta interesante observar como la población se comporta en un lugar de tensión y de socialización para diversas personas de diferentes estratos socioculturales. A través de un canal abierto como lo son los gritos, los conductores expresan sus derechos de vía frente todos sus adversarios: el resto de conductores. Se analizará las formas y posturas que toman los individuos en relación a su estrato social frente al tráfico. Analizaremos esta temática desde diferentes posturas comunicacionales como el modelo de GerbnerMeads, (....) y analizaremos el lenguaje jerarquizador desde la postura de Martín Santos. Profundizaremos en el sexismo y los diversos elementos y sus roles en la vía pública limeña, el proceso de socialización dentro de una combi, la cultura chicha y la imprudencia de los peatones.  




Somos un quinteto de estudiantes de la facultad de comunicaciones  de la Universidad de Lima  que se ha propuesto investigar acerca de las relaciones entre las personas frente a una situación de tensión: el caótico tránsito de nuestras calles. Nos resultó interesante como la comunicación se ve tergiversada por diferentes factores dentro del tráfico: un punto de socialización para muchos limeños de diferentes características sociales. Buscamos crear consciencia sobre la problemática del medio en el que vivimos y su deterioro: siendo nosotros mismos los culpables, los integrantes de esta ciudad. El presente blog representa el examen final del curso de Fundamentos de la Comunicación con el Profesor Julio César Mateus. 





Esperamos sea de su agrado
 y agárrense para el viaje en Combi Virtual!















Alfredo Aguilar.